Solo calla ante el fuerte grito que mis ojos irradian
cada vez que tu mano se posa en mi hombro.
Lanza una mirada al infinito y dile sin palabras
que quieres que se acabe.
Pon un dedo de tu mano en uno de mis labios
y no dejes que te muerda.
Hablame, rompe este cruel silencio
que poco a poco va destruyendo
las ilusiones de un corazon enamorado...
No hay comentarios:
Publicar un comentario